lunes, 23 de febrero de 2009

Vitaminas y minerales

Uno de cada cinco españoles consumen suplementos dietéticos, en forma de jarabes, pastillas o enriquecimiento de productos de consumo como la leche o los zumos “enriquecidos con...”.

¿Sirve de algo?
Depende de para quién:
· Sí, de muchísimo, para las multinacionales de la alimentación, algunas empresas farmacéuticas, herboristerias, etc.
· No, un rotundo no, para los consumidores en general. Hay excepciones y, salvo que se me olvide alguna, que seguro que se me olvida, estas son:
1. Durante el embarazo puede hacer falta un aporte extraordinario de ácido fólico o calcio.
2. Durante la lactancia hay que aumentar el consumo de calcio.
3. En dietas de adelgazamiento muy rigurosas de menos de mil Kcal al día.
4. En pacientes ancianos que no estén haciendo una dieta adecuada.
5. En personas vegetarianas que no hagan correctamente este tipo de alimentación.
6. En determinado tipo de anemias por déficit de hierro, vitamina B12 o ácido fólico (faciles de detectar en todos los casos con un simple análisis de sangre).
7. En personas con una Osteoporosis comprobada es necesario un aporte extra de Calcio y Vitamina D.

Problemas con los suplementos
· Las vitaminas hidrosolubles como la vitamina C, B1, B2 o ácido fólico, no causan ningún problema pues, el exceso, es secretado por la orina. La única contrariedad es que estamos pagando por orinar vitaminas.
· Las vitaminas liposolubles: A, D, E, K, no se excretan cuando se consumen en exceso sino que se depositan en el hígado y, a la larga , pueden producir problemas de salud.
· Los minerales, en exceso, también pueden provocar problemas de salud, como hipertensión con el sodio, cálculos en el caso del calcio, Osteoporosis con el fósforo o transtornos cardíacos con el potasio, por poner sólo algunos ejemplos.

Ventajas de los suplementos en personas sanas
Ninguna, ni en deportistas siquiera. No se está ni más sano ni más fuerte, ni se tienen menos resfriados ni la piel más maravillosa.

Con una dieta normal se obtienen suficientes nutrientes de todo tipo para una vida sana. Incluso haciendo una mala alimentación, será muy difícil que haya un déficit y, si lo hubiera, daría los síntomas que pondrían en alerta, como el cansancio en la anemia por déficit.

No me sea cazurro. Coma bien, que no es tan difícil.

viernes, 20 de febrero de 2009

Prótesis de rodilla

La rodilla es la articulación de la extremidad inferior compuesta por los huesos fémur, tibia peroné. Para permitir una adecuada movilidad la superficie articular está recubierta por cartílago. Hay muchas cositas más, ligamentos, meniscos y otras chorradas diferentes que cada una tienen su función.

Hay enfermedades que estropean hasta tal punto la articulación, que deja de ser apta para su cometido provocando menoscabo funcional y dolor. Pero no se preocupe, para eso están las prótesis, que son reproducciones de la región terminal del fémur y la tibia, de diferentes materiales, que se colocan en el lugar de la articulación. Las prótesis mamarias nada tienen que ver con éstas.

Indicaciones
La colocación de una prótesis está indicada cuando la articulación está tan destruida que, el dolor y la impotencia funcional del paciente, le impiden caminar o debe hacer grandes esfuerzos y otros tratamientos conservadores no lo consiguen mejorar.

La artrosis es la causa más frecuente de destrucción articular que obliga a poner una prótesis.

Las artritis, sea cual sea su origen, también puede llegar a necesitar en algún momento la intervención quirúrgica.

Los traumatismos repetidos sobre la articulación también pueden producir el daño.

Antes de llegar al quirófano siempre hay que intentar otros tratamientos.....”para operar siempre hay tiempo”. Los antiinflamatorios, fisioterapia, ejercicios de potenciación de la musculatura, infiltraciones en fases de dolor agudo, así como mantener un peso corporal adecuado, son medidas que siempre hay que intentar antes de recurrir al cirujano.

¿En que consiste la intervención?
Es una intervención que dura aproximadamente una hora. Se suele hacer con anestesia epidural (no se le duerme entero, sólo le atontan algo más de lo habitual). A veces se emplea anestesia general (con Isabel Pantoja no utilizaron ninguna de estas técnicas, emplearon algo mucho más sofisticado: la “anastasia”).

Tras ser convenientemente “anastasiado” y atontado, se cortan los extremos de los tres huesos de la rodilla y se sustituyen por el material escogido.

Al cortar los huesos, se suele sangrar mucho y por eso, en muchas ocasiones, tras la intervención quirúrgica es necesario poner transfusiones.

Durante unos días le dejarán puestos unos tubitos para que los restos de sangre que hayan quedado se puedan drenar.

Riesgos
Los riesgos hoy en día son escasos.
La anestesia puede ser origen de complicaciones, pero hay una especialidad que se aprende a lo largo de muchos años, que es la Anestesiología, compuesta por médicos expertos que antes de la intervención quirúrgica le verán y estudiarán para minimizar los riesgos.

Las complicaciones debidas a la propia intervención son principalmente:
· Hemorragia de la herida.
· La producción de trombosis en la extremidad intervenida. Para disminuir este riesgo, la movilización procoz de la rodilla operada es fundamental, así como un vendaje de compresión y una inyecciones de heparina.
· Infección, ya sea de la propia prótesis o neumonías. Pero no se debe de agobiar, que los quirófanos son muy limpios y los traumatólogos también. Todos vienen duchaditos de casa y después se lavan las manos, muy bien lavadas y se ponen guantes preciosos.
· Rara vez se producen movilizaciones de la prótesis o rotura de la misma.

Después de la intervención
Tras la intervención se enseñan ejercicios destinados a mejorar la movilidad y la fuerza muscular. Hay veces que se ha quedado tan bien que no se precisan y con caminar es suficiente. Finalmente podrá comenzar a caminar y podrá llevar una vida normal (sin excesos) y sin dolor.

martes, 10 de febrero de 2009

Sinovitis transitoria de la cadera

Definición
Se llama así a la inflamación de la articulación de la cadera (si fuera de rodilla u hombro tendría otro nombre) de poca duración (de ahí la sagacidad del término transitorio) que se produce en niños, habitualmente entre los 3 y 10 años de edad. Es más frecuente en varones.

Causas
Desconocemos la causa (en esto tengo el orgullo de compartir ignorancia con los más sabios del tema), pero se cree que puede ser la reacción a una infección viral previa, sobre todo de vias respiratorias superiores (tanto los más sabios como yo estamos de acuerdo).

Síntomas
Es la causa más frecuente de cojera aguda en el niño. Provoca dolor en la ingle afectada, aunque a veces se puede irradiar a la rodilla o a la parte interna del muslo. No suele haber fiebre ni otros síntomas.

Diagnóstico
Suele bastar con la historia típica y una exploración consistente en mover la cadera afectada, que se encontrará limitada en sus movimientos. La confirmación del diagnóstico se hace cuando desaparece el cuadro en pocos días sin dejar secuelas.

A veces se puede pedir una radiografía simple o una analítica, que no diagnostican este proceso, sino que sólo sirven para descartar otras enfermedades. Pero prefiero esperar una semana para ver la evolución y, si nos podemos ahorrar las radiaciones y el mal rato de extraerle sangre, mejor.

Tratamiento
Sobre todo, hay que tratar a los padres. Ver a tu precioso niño cojeando y con dolor, de la noche a la mañana, no debe ser plato de gusto. Tranquilizarlos y asegurarles que se van a poner bien en pocos días y sin ningún tipo de secuela es fundamental.

Para el niño, con reposo en cama durante unos días y un Antiinflamatorio no Esteroideo tipo Ibuprofeno (Dalsy) es suficiente.

Si a los 10 días del comienzo del cuadro sigue el dolor y la cojera, habrá que empezar a estudiarlo para descartar otras patologías.

lunes, 9 de febrero de 2009

Calambres musculares

Los calambres son contracciones involuntarias de un músculo o grupo muscular, muy dolorosos, que duran entre pocos segundos a varios minutos, y se suelen producir después de un ejercicio no habitual o por la noche. Los más habituales son en las piernas.

Causas
· Meter los dedos en un enchufe, da calambres a los osados electricistas, ya sean profesionales o amateurs (más frecuentes en este último grupo).
· Sobrecarga de un grupo muscular tras hacer un esfuerzo no acostumbrado.
· Problemas arteriales o venosos, sobre todo estos últimos (varices).
· Sobrepeso.
· Deshidratación.
· Déficit de algunos minerales (poco frecuente pero demasiado diagnosticado).
· Embarazo. Esta causa suele ser más frecuentes en mujeres, sobre todo si esperan descendencia.
· La causa más frecuente: calambres de origen idiopático. Osea, se producen, y ni pajorera idea de porqué.

Cómo prevenirlos
· Estirar las pantorrillas antes de acostarse.
· Un baño caliente antes de acostarse puede prevenir algunos episodios.
· Beber abundantes líquidos (el coñac no se cuenta como líquido), frutas y verduras, para que no nos falte de ná.
· Hacer ejercicio de forma regular, por ejemplo andar. Ver el partido de fútbol de la Sexta, no cuenta como ejercicio.
· Evite estar demasiado tiempo sentado o en una misma posición.
· No se deje embarazar a no ser que sea imprescindible.
· No meta los dedos en los enchufes.

Tratamiento
· Estirar suavemente el músculo afectado.
· Masajear la zona acalambrada y aplicar calor local.

martes, 3 de febrero de 2009

Hallux valgus (Juanete en cristiano)

El juanete es una desviación del dedo gordo del pie hacia el resto de los dedos, dejando una prominencia en el lado interno del pie. Se produce con más frecuencia en las mujeres a partir de los 60 años de edad (en plena adolescencia, justo después de desaparecer los granos). Por este motivo, tras múltiples disquisiciones de los lingüistas más afamados, no se sabe porque se les denomina juanetes y no juanitas.

En algunos casos hay una predisposición genética, sobre todo cuando aparece desde la adolescencia (coincidiendo en este caso con los granos). Pero la causa más frecuente es el uso de calzado inadecuado, precioso, pero mortificante para los pies. Los tacones de medio metro y, principalmente, las puntas afiladas hasta extremos insospechados, son la causa principal.

Síntomas
El más evidente es la deformidad del pie. Pero también puede producir dolor, aunque no siempre. Es un dolor en la prominecia formada, que aumenta al andar y usar zapatos que aprieten mucho y mejora con el reposo y el calor local. También se puede notar crujidos o roces al movilizar el dedo gordo del pie. La intensidad del dolor es muy variable y puede ser ir desde una leve molestia hasta un martirio que merma la calidad de vida.

¿Como se diagnostica?
Para un fantástico médico como yo, no tiene misterio. Reproduzco a continuación mi manera habitual de llegar al diagnóstico de esta misteriosa patología (es una exclusiva mundial):
Yo: ¿Qué le sucede?.
Paciente: Que tengo un juanete que me está haciendo la vida imposible.
Yo: no se preocupe, el motivo de su dolencia es.....¡¡¡un hallux valgus¡¡¡¡.

Las radiografías sólo son necesarias cuando se piensa operar.

Tratamiento
El más importante es el uso de un calzado adecuado. De esta forma, la mayoría deja de dar problemas y permiten llevar una calidad de vida normal.

Pero hay casos en que esto no es suficiente. Personalmente no me gusta emplear Antiinflamatorios no Esteroideos porque, aunque son efectivos para mejorar el dolor, casi nunca compensa este beneficio los posibles efectos secundarios de estos medicamentos. Además, hay que tener en cuenta que no curan, son un simple tratamiento sintomático.

La fisoterapia puede ayudar, así como el calor local o disminuir la actividad.

El uso de almohadillas, que se pueden encontrar en cualquier ortopedia (evitar las tiendas de todo a cien en estos casos), alivian en otros muchos casos. También se puede conseguir mucha mejoría con un calzado ortopédico o plantillas, que se las deberá recetar su especialista.

Cuando el juanete se pone tonto y nada de lo anterior mejora, la inmovilización del primer dedo o la infiltración del mismo, pueden ser eficaces, pero sólo durante una temporada.

Pero hay ocasiones en que, más que un juanete, es un Don Juan en toda regla. En estos casos sólo cabe la corrección quirúrgica. Hay un alto porcentaje de éxito en esta cirugía, pero no el 100% de los casos, desgraciadamente. En ocasiones la corrección es incompleta o vuelve a salir.

lunes, 2 de febrero de 2009

Histeria

Histeria procede del griego hysteros, que significa útero.

Hoy en día, se confunde el término con el insulto. Voy a intentar esquematizar, cosa nada fácil, lo que es el verdadero término histeria. Intentaré huir de conceptos puramente psiquiátricos que harían poco inteligible el texto.

Para empezar, diré que ni siquiera los psiquiatras, psicoanalistas o psicólogos, están de acuerdo en lo que implica este término. Por otro lado, cabe diferenciar lo que es neurosis histérica, como patología, y lo que es una estructura de personalidad histérica normal.

La enfermedad (neurosis histérica) conlleva la aparición de los síntomas típicos de la somatización, cuyo estadío final más conocido son los desmayos teatrales con movimientos convulsivos, aunque hay cientos de síntomas que pueden ser reproducidos en esta enfermedad. Afecta al 1% de la población, la mayoría mujeres, con lo que su frecuencia podemos observar que es realmente alta.

Pero no es de la enfermedad de lo que hoy quiero hablar, sino de la personalidad histérica, mucho más extendida que la neurosis y también mucho más frecuente en las mujeres. Para compensar, el próximo tema a tratar será “El niño rey”, muy similar a la histeria, pero predominante en hombres.

La estructura de personalidad histérica nada tiene que ver con algo insultante, eso lo quiero dejar claro, no es mi objetivo meterme con estas mujeres, sino intentar describirlas para conocerlas y, en su caso, saber comprenderlas y tratarlas. En todo momento me expresaré en femenino, como lo haré en masculino cuando hable del niño rey, aunque eso no significa que no hayan hombres histéricos.

Origen de la histeria
Los autores no se ponen de acuerdo en este punto (ni en este ni en otros muchos), por lo que expresaré mi opinión al respecto. Por consiguiente, lo que voy a escribir no se puede tomar como algo científico ni demostrado, pues no hay un nivel de evidencia elevada. Se debe tomar como una reflexión sobre lo que he leído y conozco personalmente (un porcentaje altísimo de histéricas tienen síntomas de mi especialidad).

Como en cualquier aspecto de la personalidad, la genética debe jugar un papel importante en el “ser histérico”, pero esto no se ha comprobado. El hecho de afectar predominantemente a las mujeres, a pesar de tener los mismos condicionantes en la primera infancia que los hombres y, que esta personalidad ya se manifieste en los primero años de vida, sugieren la existencia de un mecanismo genético, que en ningún momento se debe considerar como un factor determinante sino más bien como una tendencia.

Factor emocional: la separación de la madre (o de la persona que tenga el papel maternal) en el primer año de vida, la falta de caricias, abrazos y contacto físico y de una seguridad en el entorno puede ser el origen más probable de esta patología. La angustia y pánico del bebé al verse solo, aislado y frágil, con una contínua llamada de atención mediante el llanto que no es respondida por los progenitores. Este es el inicio de las dos características sobresalientes de la personalidad histérica: la separación y el miedo a no-ser.

Características de la histeria
La nula tolerancia al abandono y el miedo a no-ser (la necesidad de ser tenida en cuenta junto al miedo al compromiso) conforman las características fundamentales de estas mujeres:
1. Dependencia emocional. Tienen una necesidad imperiosa de “colgarse de alguien”. Para conseguirlo recurren a:

2. Un impulso irrefrenable de llamar la atención. Si no lo consiguen, vendrán las tan temidas pataletas. Dependiendo del entorno en que se muevan, llamarán la atención de determinada manera: pueden ser las más religiosas o puritanas, en un determinado medio, o hipersexuales y amorales en otro. Lo que haga falta para conseguir la aceptación.

3. Su primer arma siempre es la complacencia. Intentan dar todo lo que suponen que lo demás quieren. Sólo si no lo consiguen complaciendo echarán mano del chantaje e incluso la violencia. Con los hombres son seductoras y exhibicionistas, con las mujeres, sufridoras y teatrales.

4. Percepción interesada: sólo ven lo que quieren o les interesa ver. No hacen introspección, odian mirarse a sí mismas. Actúan para atraer la atención y retenerla. Son actrices que hacen el papel que necesitan en cada momento, pero sólo son actrices, detrás del personaje no hay nada más. Esto nos lleva a otra característica:

5. Paradojas contínuas. De un gran y salvaje apego pueden pasar al más despiadado odio en la ruptura. De aparentar ser una mujer hipersexuada a ser frígida en la cama. Pero no hay una elaboración consciente. Para ella el universo es tal y como lo percibe en un momento dado y en su estado de ánimo actual. Lo que hoy es blanco, mañana es negro con la misma certeza.

6. Relación de pareja muy difícil, imposible de comprender por el compañero. Hay una necesidad enfermiza de ser amada, pero la supuesta necesidad de dotar de seguridad a la relación se ve continuamente sorprendida por una necesidad paradójica de poner a prueba continuamente esa relación. Recelan continuamente de la sinceridad del sentimiento del otro e incluso necesitan demostrar su hipocresía. Imploran y suplican depender del amor del compañero y a la vez verifican que a ese amor le falta alguna cualidad esencial. Pasan del “no puedo vivir sin ti” al “tu amor no es bueno”. Del amor más teatral al odio más vengativo. Divorciarse de una mujer histérica puede llegar a ser terrible. Muchas de las falsas denuncias de malos tratos y de los “raptos legales” de hijos proceden de mujeres así.

7. Toda histérica es inmadura. La madurez es el antídoto perfecto contra la histeria. Los adultos no pueden dedicarse a fantasías y anhelos de adolescentes sin llegar a ser progresivamente inaceptables a medida que la edad avanza.

8. Sufren más que nadie y llevan este sufrimiento más como un orgullo que como un dolor. Una madre que no sufra con sus hijos no es buena madre. No existe una mujer que no le haga sufrir su marido.

9. Suelen buscar un cierto tipo de hombre: maternales. Están siempre a su disposición, siempre la comprenden. Son fácilmente manipulables y se convierten en los voceadores de su dolor.

En resumen: cásese con una histérica y no se aburrirá jamás.