jueves, 31 de diciembre de 2009

La culpa

Estamos acostumbrados a considerar la culpa como algo negativo. Pero es un sentimiento consustancial con nuestro ser. No es negativa ni positiva, sólo depende de como la gestionemos. El problema no es sentir culpa, sino en como nos enfrentamos a ella. Negarla no sirve de nada, con ello sólo escondemos el problema en vez tener la oportunidad de solucionarlo. Castigarnos tampoco es la solución. El castigo es
una manera de reaccionar, de ser pasivo y de no actuar, de no encauzar nuestro juicio sobre nosotros para no convertir la culpa en castigo y autodestrucción.

La culpa es la herramienta más poderosa que tiene nuestra conciencia para condicionarnos. Nuestros genes, vivencias, paradigmas, entornos, hábitos y pensamientos matizan nuestra percepción de la realidad y, desde esta perspectiva, podemos intuir, de forma realista o distorsionada, el rol que desempeñamos en nuestro medio. La culpa juega aquí un papel importante en la forma como nos relacionamos con las demás personas.

Tenemos que partir de la base que el ser humano es una obra en perpetua evolución. La única forma de construirnos es con el viejo sistema de ensayo y error. Esos errores, en ocasiones, dañan a otros. La culpa es el sistema del que estamos dotados para ser conscientes de los errores y los daños hechos a otros y a nosotros mismos. Y esta es la gran clave para poner la culpa a nuestro favor o en nuestra contra. Aquí podemos clasificar la culpa en dos tipos:

1. La culpa activa: si la vergüenza que sentimos ante el fracaso sirve para iniciar nuevas líneas de actuación, si consigue que nos abramos a los cambios, la convertimos en una herramienta poderosísima de crecimiento.

2. La culpa pasiva: si la negamos, escondemos o nos autocompadecemos, si sólo reaccionamos ante ella, se convierte en una losa que impide mejorar y nos arrastra a la autodestrucción. Pocos sentimientos provocan tanta obsesión como la culpa pasiva.

Y no siempre se manifiesta como culpa. Muchas veces le damos otros nombres que nos impiden llegar a la esencia del problema y, por ende, a su solución:

1. A veces la disfrazamos como responsabilidad. Nos podemos engañar y hacernos creer que tenemos una responsabilidad, que no sentimos ni queremos, con los demás. Hacer cosas que detestamos pero que pensamos que, si no las hacemos, nos sentiremos culpables. Hay personas que creen que siempre debe haber alguién disponible para ayudarles. Hay manipuladores, auténticamente profesionales, que consiguen este resultado en nosotros. "Si no haces esto por mí, te sentirás culpable" y esto condiciona nuestra conducta.

Pero nuestra primera responsabilidad es con nosotros mismos, pero para ello es preciso desterrar miedos. Saber decir NO. Y esto puede ser difícil, pero necesario. Si no lo hacemos así, si seguimos el camino cómodo, podemos decidir que otros nos controlen en vez de hacer valer nuestros derechos. La culpa pasiva ha ganado. Y es curioso que, con la asunción de estas "responsabilidades" hacia los demás, se oculta, muchas veces, una necesidad imperiosa de ser aceptados, queridos. Y es precisamente lo que no se obtiene. Una persona que se tiene como primera resposanbilidad a sí mismo, suele ser una persona madura, equilibrada, con unas relaciones interpersonales en consecuencia con su estabilidad y bienestar y es, por tanto, una persona mucho mejor aceptada y más querida. Con un cierto grado de "egoísmo" se consigue amar y que te amen mejor.

2. Otras veces la disfrazamos de resentimiento. Cuando se elige complacer al otro, en contra de nuestros deseos y necesidades, surge el resentimiento, un sentimiento profundamente ligado a la culpa. A su vez, al sentir resentimiento, se crea más culpa, creando un círculo maléfico y autodestructivo, tanto de la persona como de la felicidad.

3. Otras lo disfrazamos de secreto, de algo malo que hemos hecho y nos avergüenza que alguién se entere por temor a perder la estima de los demás. Este secreto nos machaca, maniata y nos hace sentir malos e indignos de amor. Esta es una de las fuentes de la baja autoestima. Se da la gran paradoja de que guardamos el secreto para que nos quieran y, el hecho de guardarlo, nos hace insensibles al amor que recibimos pues, una persona con autoestima baja no se siente amado. En estos casos es increíble lo liberador que puede ser contar ese secreto. Puede llegar a cambiar la vida por completo.

4. La culpa disfrazada de bondad. Tendemos a creer que una víctima es bondadosa. Evidentemente es falso, una víctima es una víctima y en ello nada tiene que ver la bondad o maldad del individuo. Pero existe esa tendencia natural a arropar, ayudar y servir a la víctima otorgándole, por el hecho de serlo, una halo de bondad, que puede o no ser cierto. Hay víctimas reales, pero también hay víctimas artificialmente creadas. Estas últimas buscan el beneficio que se les otorga a las verdaderas víctimas y, además de ser arropadas y queridas, también consiguen algo mucho más importante: son consideradas BUENAS. Hay personas que se solazan en su propio sufrimiento, las más de las veces no realista, sin poner un ápice de voluntad en solucionar sus problemas, para así seguir sufriendo o incluso aumentarlo. En este caso son manipuladores de la culpa.

5. La culpa disfrazada de disculpa. ¿Nunca os habéis encontrado personas que lanzan a los cuatro vientos lo culpables que se sienten ante un hecho en el que, objetivamente, no tienen la más mínima responsabilidad o culpa?. Buscan la comprensión de los demás y las palabras clave: "tú no tienes culpa de nada". Además, se benefician del punto 4, la victimización.

Cuando es más fácil que ocurra la culpa pasiva.

La culpa, en la mayoría de ocasiones, es consecuencia de la escala de valores con que nos regimos en la vida. Si se produce un desencuentro entre nuestro ideal de cómo ha de ser nuestro comportamiento y lo que realmente hacemos y nos comportamos, aparecerá la culpa.

La escala de valores es una clave fundamental. Una escala demasiado exigente o rígida, va a ocasionar numerosos conflictos. Debemos ser realistas con nuestras posibilidades. No somos ni podemos pretender ser perfectos. El perfeccionismo paraliza.

El que cree que debe ser buenísimo e impoluto, que no se puede permitir el más mínimo desliz "maligno", está abonado a la culpa pasiva, al autocastigo contínuo y destructivo. Un excesivo nivel de autoexigencia no nos lleva a ser mejores sino a ser infelices y personas insatisfechas.

El que tiene una concepción dual de la moral: blanco o negro, bueno o malo, sin recordar que en todo hay matices, está abonado a la culpa pasiva y a la intransigencia.

Reacciones ante la culpa.

Como he dicho antes, la reacción ante la culpa no es positiva. Es mejor actuar que reaccionar. Se me ocurren tres formas de reaccionar:

1. Reacción de autocastigo. Nos castigamos por todo lo que nos sucede a nosotros e incluso, de lo que les sucede a los demás, tengamos o no auténtica responsabilidad en lo sucedido.

2. Reacción extrapunitiva: culpabilizamos de todo, inclusive de nuestros males, a los demás, como forma de desresponsabilizarnos ante lo sucedido.

3. Reacción "sin castigo": nadie es culpable de lo sucedido. Han sido las circunstancias, los hades, el destino. Posiblemente, de las tres reacciones, sea la mejor, pues nos quita sufrimiento, pero también nos resta la oportunidad de cambiar, de mejorar.

Cuanta mayor concordancia exista entre nuestro pensar y actuar, y cuanto más lejos se mantenga nuestro razonamiento de absolutos, rigideces y perfeccionismos, menos veces se nos generará el sentimiento de culpa. Pero sin duda, cuando somos incoherentes, el sentimiento de culpa aparece. En ese momento, en la medida en que aparquemos la descalificación y el castigo, nos liberaremos de la paralización y mantendremos la suficiente fluidez interna que nos llevará a abordar nuestras faltas de coherencia como problemas a resolver y no como losas autodestructivas.

Si la transgresión de nuestras propias normas hace que se presente la culpa, el reto es convertir ese sentimiento en:

•Una señal, que sirve para cuestionarnos cómo hacemos lo que estamos haciendo. A veces es bueno que nos encontremos en entredicho: las revisiones personales posibilitan nuestro enriquecimiento.
•Un momento de reflexión y análisis de por qué nos surge, sin entrar a desvalorizarnos ni a hundirnos en el desasosiego y el sufrimiento.
•Un diálogo interior que nos lleve a designar y concretar cuál es la conducta por la que sentimos la culpa.
•La búsqueda de soluciones, o en su defecto alternativas a cómo reparar el daño causado.
•La petición de perdón a las personas afectadas por nuestra conducta.
Si el sentimiento de culpa nos afecta de tal forma que nos conduce a una situación emocional que nos impide un análisis claro, conviene acudir a un profesional para que pueda ayudarnos a encontrar las soluciones adecuadas.

Uno de los motivos del enorme éxito de las distintas religiones es el manejo de la culpa. La confesión, la absolución, ofrecer sacrificios a cambio e nuestros pecados....¿a qué os suena?. Muchas de las religiones primero crean la culpa, gracias a un código ético muy estricto e imposible de cumplir, pero a la vez, da la solución, el perdón de Dios.

domingo, 20 de diciembre de 2009

Evitar la depresión

No voy a hablar de los muchos tipos de depresión que existen ni de los transtornos mayores de la depresión. Sólo quiero incidir en la prevención de algunos tipos de depresión. En todo lo que puede llevar a la misma y está en nuestra mano evitar.

Hay conductas y patrones de comportamiento que facilitan que una persona, más tarde o temprano, pueda desarrollar una depresión. Estas actitudes ante la vida y los problemas se entrelazan con las vicisitudes externas que pueden acontecer y facilitar o dificultar el desarrollo de la depresión. Pero como lo externo a nosotros es difícil de controlar, es mucho mejor aprender a controlar nuestras emociones.

Repasemos algunos aspectos que pueden facilitar la aparición de la depresión.

1. Perfeccionismo.
Ningún perfeccionista es perfecto, ni los que le rodean. Nunca se termina de estar satisfecho con lo que se consigue. Por eso, la persona perfeccionista suma insatisfacciones. La insatisfacción es una llave para entrar en la depresión. Hay que intentar mejorar cada día, pero no ser perfecto.

2. Obsesión por tener una imagen inmaculada.
Todos tenemos una imagen de nosotros mismos, pero obsesionarse con la misma puede ser contraproducente. Vivir para mejorar la imagen, al precio que sea, lleva a tener una vida falsa en donde, las apariencias, cuentan más que las experiencias y el aprendizaje.

3. Justificaciones.
Si cometemos un error, y cometemos muchos, hay tres formas básicas de enfrentarse al mismo:
A) Negarlo tozudamente. Estamos condenados a repetirlo una y otra vez.

B) Admitirlo para, a continuación, justificarlo. Volvemos a estar condenados a repetirlo.

C) Admitirlo y aprender del mismo. Se puede buscar el origen del error, pero nunca para justificarlo, sino para no repetirlo.

4. Miedo.
El miedo es el origen del stress. El stress excesivo puede producir ansiedad y la ansiedad puede ser la antesala de una depresión.
Simplicando mucho, quizás demasiado, podría hablar de dos tipos de miedos:

A) Miedo positivo.
Ante una amenaza real e inminente, el miedo provoca una reacción cerebral que acarrea una respuesta fisiológica, sobre todo la secreción de adrenalina, que nos permite actuar con mayor rapidez y eficacia ante la emergencia. Un león hambriento que se acerca a nosotros con cara de parecerles apetitosos, conseguirá que nuestro miedo provoque suelta de adrenalina, que conseguirá que se acelere la respiración y el corazón y ponga en tensión nuestra musculatura para que sea más fácil enfrentarnos a él o huir.
B) Miedo negativo.
Si nos empeñamos en ver 100 leones todos los días, el mecanismo fisiológico del stress está disparado continuamente y nos lleva a un estado de ansiedad permanente. Para evitar ver tantos leones al día, además de evitar ir a Kenia o al zoo, a mí me ha ido bien una simple clasificación de los problemas:

a) Problemones: sólo son problemones aquellos que ponen en grave riesgo la vida propia o de los que más queremos. En estos casos, controlar las emociones es muy complicado y el llanto es un arma absolutamente necesaria.

b) Problemas: situaciones sociales o personales que, pudiendo ser difíciles, no comprometen ni la vida ni el bienestar propio o de los seres queridos. Cuando hablo de bienestar no me refiero a tener placeres o buen nivel de vida, sino enfermedades crónicas complicadas o dificultad económica seria que dificulte la satisfacción de necesidades básicas como la alimentación o vivienda.

c) Problemillas. Todos los demás. O sea, el 99 % de los "problemas" que aquejan a los españoles.

Si conseguimos aprender a vivir los problemillas como lo que son, problemillas, tendremos muy pocas posibilidades de caer en una depresión. De los problemillas no hay que preocuparse. Sólo nos tenemos que ocupar. Si nos empeñamos en vivir los problemillas como problemones, se convierten efectivamente en problemones y la vida se convierte en un valle de lágrimas y el mundo es un sitio hecho para sufrir.

Para conseguir ubicar correctamente nuestros conflictos, nos tenemos que dar una ducha de realismo.

No hay que pensar en los problemas sino en las soluciones. Es la única forma que conozco para pasar de ser pasivo en tu vida y verla pasar a ser activo y cambiarla.

5. Aprender a amar.
El amor debe ser gratuito. Se debe dar sin esperar nada a cambio. En el momento en que se espera recibir algo, se crean expectativas que pueden matar el sentimiento y hacernos sufrir. Es un sufrimiento producido por querer controlar lo que otros hacen o sienten. Un amor puede no ser correspondido y en este caso sólo cabe aceptarlo y terminar. Pero también puede ser correspondido pero expresado no como quiero o deseo yo, sino como lo expresa el otro. En este caso sólo cabe saber recibirlo tal y como el otro lo da.

6. Aceptar
"Uno sufre cuando quiere controlar lo que otros hacen. Cuando te rindes a que hagan lo que quieran te liberas de ese sufrimiento. Lo que realmente importa es lo que haces tú, no lo que otros hagan; quién eres tú, no quién es el otro. Cuando les das permiso a ser quiénes ellos quieran, te das permiso a ti mismo a ser quien eres". http://consciencianueva.blogspot.com/2009/08/sufrimiento.html.

No aceptar a los demás puede ser una fuente inagotable de sufrimiento. Conozco padres que darían la vida por sus hijos, pero por mucho que los quieran, no les gusta como son. Es una auténtica tragedia tanto para los padres como para los hijos. Sólo cabe aceptar a los demás como son.

7. Aprender a actuar y no a reaccionar.
Para ello es fundamental ser conscientes de como actuamos y porqué para poder intervenir y no dejarnos llevar. Si ante un "problemilla", como cinco suspensos de nuestro hijo, activamos la respuesta automática (reaccionamos) le echaremos la consabida bronca, que no va a arreglar nada. A la semana volvemos a reaccionar y le compramos la moto y así vamos reaccionando una y otra vez a los estímulos que nos van llegando. Vamos parcheando. No educamos, improvisamos.
Actuar significa tener claros los conceptos de educación global e ir actuando conforme a esos conceptos. Tener claramente marcados unos límites que no se sobrepasan nunca y, cuando se sobrepasan, tiene consecuencias.

8. Disfrutar de lo que se tiene.
No es más feliz el que desea muchas cosas sino el que sabe disfrutar con lo que tiene. ¿Tan difícil es hacer consciente las muchas cosas buenas que tenemos?. Hay que deleitar activamente ese desayuno maravilloso, esa cama magnífica, ese beso, esa caricia y tantas cosas que nos pasan desapercibidas porque nos hemos acostumbrado a ellas. No hay que acostumbrarse a lo bueno.....hay que disfrutarlo.

9. Arriésgate.
Con el tiempo te arrepentirás más de lo que no has intentado que de lo que no has conseguido.

Cuando algo no va bien, cambia. La vida es un eterno cambio y sólo el que lo asume es feliz. Y para cambiar tu vida muchas veces, lo primero, es cambiar tu forma de pensar.

10. Responsabilidad.
No seas responsable. Es mejor estar comprometido. El responsable sólo hace lo que se supone que debe hacer. El comprometido ama lo que hace. Mis hijos no son mi responsabilidad, son mi compromiso. No me pesa hacer por ellos todo lo que hago, porque lo hago con amor. Y lo que está hecho con amor jamás va a reprocharse (ya sabeis, el típico: "con todo lo que he hecho por tí"). Creo que nunca diré eso a mis hijos, porque no lo siento. Todo lo he hecho por MI amor, no por ellos.

11. Sonríe.
Siempre sonríe, aunque no lo sientas, aunque no tengas ganas. La sonrisa, por sí misma, es una de las mayores armas que nos proporciona nuestro ceebro para conseguir ser más positivos.

domingo, 15 de noviembre de 2009

Obesidad

Engordar o adelgazar depende de tres factores: las calorías que ingerimos, las calorías que gastamos y el líquido que retenemos.

Calorías que se ingieren
Las calorías que ingerimos en la alimentación es el factor más importante. Si se consumen productos hipercalóricos, con muy escaso volumen obtenemos la cantidad de calorías que gastamos y, sin embargo, nos parecerá que apenas hemos comido.

En las calorías que ingerimos entra de lleno el autoengaño. La mayoría de obesos creen que comen mucho menos de lo que realmente comen. Se dice que el mejor medio de perder peso es preguntando a un obeso por lo que come y comer exactamente lo que “dice” que come.

Las calorías que gastamos
Dependen, en buena parte, del ejercicio que hagamos. Pero no sólo del ejercicio, sino también de nuestros genes.

En la lucha por la supervivencia, aquellas personas más eficientes en el consumo de calorías, han sido las que han tenido más probabilidades de sobrevivir en un entorno hostil con escasos alimentos. Estas personas consiguen hacer las mismas cosas que otras con un gasto energético menor (es como un coche que gaste más o menos gasolina para hacer los mismos Kms). Con poco alimento sobreviven mejor que los que necesitan gastar mucha energía en hacer las mismas cosas.

Pero esto es fantástico en un entorno hostil, con escasos alimentos. Sin embargo, como sucede en la actualidad, si los alimentos abundan, se tendrá más propensión a engordar.

En diversos estudios se han comparado a personas con facilidad para engordar con otras con facilidad para estar delgadas y se ha encontrado que los movimientos de los primeros son mucho más pausados que los de los segundos. Tienden a sentarse más fácilmente y a realizar menos ejercicio "inútil". Andan más despacio y moviendo menos los brazos y otras partes del cuerpo (con lo que gastan menos al andar). Existían otras diferencias más en cuanto a gestos y movimientos que no recuerdo bien, pero que en suma conseguían un uso más eficiente de la energía y gastaban menos calorías para hacer las mismas cosas. Todo esto está determinado genéticamente.

Otra cuestión muy importante es el factor "termo". Gastamos una cantidad de energía para el mantenimiento de nuestra temperatura corporal. Si se está obeso, la gran cantidad de grasa, hace que se aísle térmicamente el cuerpo y la pérdida de energía es menor, por lo que hay que gastar menos calorías en mantener los 36º de temperatura de nuestro organismo. Por eso, cuanto más gordo se está, con muy poco que se coma es suficiente para mantener el peso. Por el contrario, en personas muy delgadas, al no tener grasa, no existe aislamiento térmico (el termo es de muy mala calidad) y necesitan consumir muchas calorías para el mantenimiento de la temperatura corporal. Por eso estas personas se hinchan de comer y no engordan. Hay un dicho, que es totalmente cierto: es más fácil hacer adelgazar a un obeso que hacer engordar a un delgado.

Se conocen algunos genes implicados, pero no todos, que consiguen un uso eficiente de la energía. Pero sí se sabe que existen.

Estos genes no pueden servir como excusa para engordar hasta el infinito. El que los tenga, no se puede amparar en ello y echar toda la culpa de sus Kilos a los genes, porque también existe la voluntad para que, en el caso de tenerlos, comer menos y mejor y hacer más ejercicio.

Acúmulo de líquidos
Cuando se acumulan más líquidos de la cuenta, siempre se debe a una enfermedad, excepto en el embarazo. Puede ser un trastorno hormonal, alérgico, una enfermedad cardiológica, renal o hepática. Pero es fácil saber si se acumulan líquidos porque, con una exploración simple, se averigua.

¿Cómo adelgazar?
Sin duda, con sufrimiento.

Hay que ingerir menos calorías de las que se gastan. Así de simple. Si se ingresan pocas calorías y se gastan aún menos, engordaremos.
No vale comparase con la vecina hiper delgada que come como un camionero. No sirve de nada, porque la vecina puede hacer mucho más ejercicio que nosotros o simplemente tener unos genes más propicios.

Tampoco vale el autoengaño: si acumulas grasa no te quepa duda que has comido más calorías que las que has gastado.

Tampoco vale la resignación ante unos malditos genes ahorradores. Los genes no son determinantes absolutos de la obesidad sino que sólo provocan una facilidad mayor para engordar. Depende de tu voluntad estar delgado a pesar de tener genes desfavorables.

Con respecto a la dieta, es importante que sea regular, que no te hinches en un momento y dejes de comer durante muchas horas. La alimentación sana consiste en comer de todo, sin excesos y regularmente. Un buen desayuno es fundamental y lo ideal es hacer cinco comidas al día: desayuno fuerte, tentempié a media mañana, como una fruta, almuerzo medio fuerte, sobre todo a base de legumbres, merienda suave y cena muy suave (ensaladas, frutas).

Con respecto al ejercicio, éste debe ser aeróbico y progresivo. Sin prisas pero sin pausas.

martes, 29 de septiembre de 2009

Mujeres que aman demasiado

Demasiadas mujeres se obsesionan con hombres adictos al trabajo, al alcohol, a las drogas o a cualquier otra cosa....menos a ella. Se enganchan a sujetos inmaduros y no son capaces de salir de una relación que sólo lleva al sufrimiento.

"A pesar de todo el dolor y la insatisfacción que acarrea, amar demasiado es una experiencia común para muchas mujeres que casi creemos que es así como deben ser las relaciones de pareja", explica la terapeuta estadounidense Robin Norwood, autora del libro “Las mujeres que aman demasiado”.

Desean “salvar” al hombre que aman. Si son capaces de cambiarlo conseguirán el fin último que las impulsa: que la ame. Justifican lo injustificable: la crueldad, la indiferencia, la deshonestidad o la adicción de sus parejas. Soportan y disculpan cualquier maltrato hasta el punto de conseguir “comprender” que ella es la que ha cometido el error por el que el pobre chico la ha molido a palos. Cuanto más humillada es, más le ama y más le consiente, porque sólo con el inmenso amor que le da.....cambiará....y la amará.

En su historial de amoríos, siempre subyace la necesidad de sentirse mejores (siempre es el otro el que tiene que cambiar para ser tan bueno como ellas) y de sufrir por amor. Tal cual nos lo han vendido desde tiempos inmemoriales: el amor, si se sufre, es más romántico, más “verdadero”.

La obsesión por estos tipos es tal que llegan a olvidarse de amigos, familia (que suelen advertirla de lo que ella no quiere oir) o cualquier otro tipo de interés personal. Toda su vida gira en torno a su......adicción. Porque al fin y al cabo se convierte en una adicta a amor.

¿Eres una mujer que ama demasiado?

Según Robin Norwood puedes hacerte las siguientes preguntas:

¿Para usted estar enamorada significa sufrir?, ¿La mayoría de sus conversaciones con amigas o compañeros de trabajo son acerca de él?. ¿Disculpa su mal humor, su mal carácter su indiferencia o sus desaires? ¿Subraya en los libros todos los pasajes que le ayudarían? ¿Soporta conductas que no le agradan pensando que si usted fuera lo suficientemente atractiva, él cambiaría?.

Si su contestación ha sido afirmativa, plantéese que su relación de pareja perjudica su bienestar emocional y que debe buscar ayuda para superar la situación.

lunes, 11 de mayo de 2009

La píldora del día después

Al hablar de la píldora del día después (PDD) se pueden tomar en consideración cuestiones puramente científicas y argumentos de índole social o ética.

Cuestiones científicas
La PDD es un fármaco denominado Levonorgestrel, que en España se comercializa por dos laboratorios con los nombres Lornevo y Prostinor. Ambos llevan dos comprimidos de 0.75 mg de la sustancia.

El Levonosgestrel, además de tener un nombre muy raro, es un progestágeno, osea, una sustancia similar a la progesterona, la hormona que se fabrica fundamentalmente en la segunda fase del ciclo menstrual, cuya finalidad principal es preparar al útero para ofrecer todas las comodidades imaginables al embrión.

Pero bueno, ¿no es un método anticonceptivo?. Pues sí, además con una eficacia que ronda entre el 60 al 95%. Será más o menos eficaz dependiendo de si se tarda mucho o poco en tomar la primera dosis. Cuanto antes, más eficaz. A las 12 horas de la primera toma hay que tomarse la segunda. Se debe tomar dentro de las 72 horas después de la relación sexual (si la relación sólo ha sido verbal, no está indicada).

Este método no protege de las enfermedades de transmisión sexual.

¿Cuándo está indicada?
Está indicada como anticonceptivo de emergencia dentro de las 72 horas siguientes a haber mantenido relaciones sexuales sin protección o al fallo de un método anticonceptivo.

Mecanismo de acción
No se conoce bien como actúa. Se cree que ejerce su acción a tres niveles:
1. Impidiendo la ovulación. Si no hay óvulo, los espermatozoides no tienen nada que hacer y se suicidan. Si los espermatozoides son japoneses (que de todo hay en la viña del señor) hay pruebas de que se hacen el hara kiri.
2. Impidiendo la fertilización. El óvulo ya ha salido de la madriguera y los espermatozoides lo huelen y van como locos a por él, pero la PDD impide que entren en él.
3. Puede producir cambios en el endometrio que impiden que el embrión, que ya se ha formado, anide y se desarrolle. En este último caso se le podría calificar como abortivo.
Pero si la mujer ya estaba embarazada, y la pobre no lo sabía, no ejerce ningún efecto sobre el embrión ya anidado.

Modo de empleo


- Hay que tomarla con el estómago lleno.

- Durante el tiempo que se tome hay que evitar fumar, tomar café, té y bebidas de cola (esto último tiene premio).

- No se debe tomar alcohol durante esos días, puesto que puede bajar la eficacia del tratamiento.

- Existen algunos medicamentos que no se deben tomar junto con este tratamiento como barbitúricos (incluyendo primidona), fenitoína, carbamazepina, plantas medicinales con Hypericum perforatum (hierba de San Juan), rifampicina, ritonavir, rifabutina y griseofulvina.

- No se deben mantener relaciones sexuales con penetración hasta que no se tenga la siguiente regla, porque en caso de tener otra situación de riesgo no sería conveniente volver a tomar el tratamiento dos veces en el mismo ciclo menstrual.


Efectos secundarios a corto plazo
En algunas ocasiones pueden aparecer molestias derivadas del tratamiento como tensión mamaria, fatiga, náuseas, vómitos, dolor abdominal y dolor de cabeza. Estos efectos generalmente no duran más de 24 horas. La siguiente regla puede verse alterada o puede ser igual que siempre.

Efectos secundarios a largo plazo
Se desconocen. Teniendo en cuenta que es un auténtico bombardeo hormonal, no se puede descartar que en los próximos años se puedan ver casos aumentados de cáncer de mama, trombosis, infartos o accidentes vasculares cerebrales, como sucede con los anticonceptivos usuales, pero repito, esto sólo son hipótesis no confirmadas.

Consumo responsable
Como con cualquier otro medicamento, cuanto más se use, más posibilidades existen de padecer efectos adversos en el futuro. Por ello, no se debe convertir en el método anticonceptivo habitual sino en una excepción. Vale que no somos perfectos y, el que más y el que menos se puede equivocar alguna vez, vale, pero no seamos unos irresponsables tampoco.

Cuestiones de índole social y ética
• Hay personas que están en contra del aborto. Por consiguiente, es necesario informar que esta PDD puede ser abortiva (no está del todo demostrado, pero es muy posible). De esta forma, una mujer que no está a favor del aborto, lo debe saber para poder actuar en consecuencia.

• Si se hace un consumo irresponsable de este método, puede suponer una carga más para las mujeres. Se podría responsabilizar a las chicas de que no se queden embarazadas y podría darse un paso atrás en el uso del preservativo que, a todas luces, es el mejor método anticonceptivo, sobre todo para los más jóvenes, ya que no sólo tiene una enorme eficacia anticonceptiva sino que además protege de las enfermedades de transmisión sexual.

• La venta libre a menores de edad, también puede ser un motivo de disputa social. Le veo ventajas e inconvenientes. Por un lado, las menores pueden ser más fácilmente manipulables por su entorno para que usen este método como el principal o incluso único. Por otro, un embarazo no deseado en una niña de 14 años, aborte o no aborte, puede ser enormemente traumático.

En resumen: la PDD es una opción más, y de ello me alegro, por la gran cantidad de abortos que pueden evitarse, pero hay que usarla con juicio y responsabilidad.

lunes, 9 de marzo de 2009

Seguridad Social

El sistema sanitario público español es una auténtica joya, fruto del trabajo y la previsión de muchos. Con todos sus grandes defectos, es un modelo a seguir para cualquier país que quiera hacer del estado de bienestar, el centro de la actividad social.

Curiosamente, fue durante el régimen de Franco en donde se pusieron los cimientos de la Seguridad Social. Los sucesivos gobiernos democráticos, con sus luces y sombras, han profundizado y mejorado esta forma de protección social. Si hay algún punto en que la inmensa mayoría de los españoles estamos de acuerdo, es en el mantenimiento y mejora de esta herencia.

La base fundamental del sistema de salud es la universalidad de las prestaciones. Tener la tranquilidad de que, en caso de una enfermedad grave, cualquier español puede tener garantías de una asistencia sanitaria de primer orden, no tiene precio…..aunque sí que lo tiene, pero a eso iremos más tarde.

Cuando he dicho calidad de primer orden, sé de lo que hablo. Nuestra Sanidad es capaz de ofrecer lo mejor y lo último, a un nivel técnico y humano que nada tiene que envidiar a los mejores hospitales norteamericanos. Nuestros médicos son realmente buenos y muy preparados. Nuestros enfermeros posiblemente sean los mejores del mundo, y no es una exageración. Miles de médicos y enfermeros españoles, que están trabajando en Suecia, Reino Unido, Portugal o Francia asombran en aquellos países por su profesionalidad y humanidad. De hecho, cada año, son solicitados miles de compatriotas para que se vayan a trabajar a estos y otros países. No hay médico que vaya a USA a perfeccionar alguna técnica que no reciba ofertas muy jugosas para quedarse.

Pues bien, tenemos el dinero, tenemos a los profesionales adecuados (he hablado de médicos y enfermeros, pero puedo incluir a cualquiera de las profesiones sanitarias que trabajan en cualquier centro), tenemos las posibilidades de formación seria para los nuevos titulados, tenemos la convicción de toda nuestra sociedad de que esta forma de actuación es la correcta, sin embargo, veo nubarrones en el horizonte.

Problemas
El gasto sanitario se ha disparado hasta unas cotas imposibles de mantener a largo plazo. La burocratización progresiva del sistema, la inflexibilidad en la organización, la asunción de mayores competencias, el aumento incontrolado de usuarios (cada vez es más frecuente asistir a marroquíes no residentes en España que sólo acuden a nuestro país como turistas para encontrar asistencia sanitaria gratuita) y, por encima de todos ellos, el imparable aumento del gasto farmacéutico, hacen de nuestro sistema nacional de salud un gigante con pies de barro. Soluciones hay, ¿pero estamos dispuestos a asumirlas?

Origen de los problemas
1. Derivados del mal uso de los servicios. Como he hablado en la entrada previa, del uso de los servicios de salud se ha pasado al abuso de los mismos. La Sanidad ha pasado de cuidar de personas enfermas a hacerse cargo de todo tipo de problemas que poco tienen que ver con la medicina. Muchos problemas puramente sociales o psicológicos han pasado al ámbito de la Sanidad, donde no estamos preparados para esta problemática, por lo que los resultados que obtenemos son malos y caros. Sabemos tratar la Tuberculosis o el SIDA del drogadicto, pero no sabemos qué hacer con un drogadicto. Podemos curar la puñalada recibida por una mujer por parte de su marido, pero sólo llegamos hasta ahí. La profunda tristeza y la indefensión de esta mujer no requiere tanto de un psiquiatra sino de otros tipos de ayuda. Curar las infecciones del que vive debajo de un puente son nuestra especialidad, pero de nada sirve curarlo si, al darle de alta, le devolvemos al mismo puente. Los trabajadores sociales y otros profesionales tienen mucho más que decir en estos casos que los trabajadores de la salud, que se han preparado para otras lides.

2. Abuso por parte de los usuarios. Corre un chiste que es absolutamente cierto: en la sala de espera del médico se reúnen las mismas personas todos los días. Un día no acude Mari Pili y las otras se preguntan extrañadas: ¡¡¡qué raro que Mari Pili no haya venido hoy¡¡¡. A lo que les responde la más enterada: es que hoy no ha venido al médico porque está enferma. Pues sucede, aunque parezca extraño. Las consultas médicas se han llenado de personas sanas con problemas nimios que no precisan de ningún tipo de actuación médica. Un catarro, salvo excepciones, sólo requiere de abundante agua. Una gripe, con leche calentita, agua abundante, cama y algún antitérmico suave dura lo mismo y da las mismas molestias que con el mejor tratamiento prescrito por el mejor infectólogo del mundo (que si es el mejor del mundo le mandará leche caliente, agua, cama y paracetamol). Si me he dado un golpe en el brazo y me molesta durante unos días, no hay que acudir a Urgencias de Traumatología a que me digan lo que ya sé. No busquemos la salud en el Hospital o en el Centro de Salud, sino en el sentido común, el ejercicio y en llevar una vida sana.

3. Abuso por parte de las asociaciones de pacientes. Las asociaciones de pacientes, en ocasiones, más que una labor de información o de concienciación, lo que intentan es una presión directa sobre el gobierno para beneficio de sus propios intereses. Buscan estos beneficios, mediante la victimización (llegan a exagerar hasta límites insospechados la enfermedad de la que se trate), la exageración (suelen abultar las cifras de afectados hasta límites increíbles) y la desinformación(son las primeras en hacerse ecos de los supuestos avances que gentilmente les han cedido las farmacéuticas para conseguir vender un determinado medicamento, generalmente mucho más caro que el que hay pero igual de eficaz). Por supuesto que no todas funcionan de esta manera y hay múltiples ejemplos de asociaciones ejemplares.

4. Abuso por parte de los profesionales. Una mala preparación o simplemente una dejadez imperdonable, multiplica el gasto innecesario. Para algunos profesionales es más fácil tirar de receta que de consejos adecuados, mucho más baratos y, sobre todo, mucho más eficaces. Hemos acostumbrado al personal a que todo tiene solución con la pastillita adecuada y el usuario está encantado con esta solución, más fácil y cómoda, pero demasiado costosa en dinero y en efectos indeseados. A veces se debe a falta de tiempo, en otras ocasiones, muchos compañeros creen en lo que hacen cuando tratan con medicamentos un colesterol de 200 o una fiebre claramente viral con antibióticos. Pero también está el que lo hace a sabiendas tras recibir regalos de un laboratorio farmacéutico. En un caso por haber descuidado la formación y en otro como simple y pura estafa, en ambos hay una clara responsabilidad.

5. Abuso de las farmacéuticas. Este punto da para una y cien entradas. Las empresas farmacéuticas sólo buscan el beneficio económico. Muchas lo consiguen mediante un trabajo honesto, científico y riguroso y contra esto no tengo nada que objetar: se beneficia el empresario y se beneficia la sociedad entera. Pero otras consiguen abultados negocios haciendo auténticas barrabasadas, como la creación de nuevas enfermedades, creando necesidades aprovechándose de la ignorancia de la gente en temas científicos. Para que os hagáis una idea del gasto farmacéutico en España y su constante subida, según las cifras oficiales, en 1990 el gasto fue de 2.524.250.840 euros (el 0.51% del PIB) y en 2008 11.960.488.108 euros (casi el 1% del PIB) con una subida en 18 años de 473.82 %. Claramente insostenible a largo plazo.

6. Abuso de los medios de comunicación. Son los primeros en hacerles el juego a la gran industria de la salud propagando a los cuatro vientos los “interesantes” descubrimientos sobre nuevas enfermedades y nuevos medicamentos que no sirven para nada. El mensajero, en este caso, tiene una enorme responsabilidad, pues los que publican este tipo de noticias no suelen tener una mínima preparación que les haga capaces de distinguir el grano de la paja. Si quieren publicar artículos de salud, que acudan a expertos en el tema que sean capaces de criticar el artículo en cuestión.

7. Abuso por parte de los políticos. Saben lo que está pasando y, si no lo saben, no sé si es peor. Cortar todos estos abusos sé que tendría un coste muy alto para cualquier político honrado que acometa un cambio, pero es absolutamente imprescindible si queremos salvar nuestro sistema.

8. El buenismo de buena parte de la sociedad. Cualquier persona que acuda a nuestro país, tiene los mismos derechos a usar los servicios sanitarios que los españoles. Por poneros un ejemplo que vivo en primera persona. La unidad de hemofilia de mi Hospital lleva a aproximadamente 300 pacientes con esta enfermedad. El tratamiento con factor es carísimo y se estima en unos 50 millones de pesetas por paciente y año. Gracias a esta medicación los hemofílicos pueden hacer una vida absolutamente normal. Pues en los últimos años ya llevamos contabilizados 30 niños marroquíes que acuden cada tres meses como turistas con sus padres para acudir a la Unidad a recoger el factor. Estos 30 niños nos cuestan a todos 1.500 millones de pesetas cada año. Pero la cosa no va a menos, sino que están aumentando de una forma increíble. Estimamos que dentro de dos años, al ritmo actual, nos haremos cargo de 100 niños….Sólo contando con marroquíes, porque esto se ha ido extendiendo y no nos extrañaría que en menos de 10 años llegasen a ser 1000 niños del Magreb, pues los médicos marroquíes ya se han empezado a enterar de nuestra generosidad y cada vez informaran a más familias sobre el maravilloso tratamiento que regalamos en Sevilla. Osea, según las estimaciones que se han hecho por los economistas del Hospital, dentro de 10 años, y sólo con marroquíes, anualmente tendremos que gastar 50.000 millones de pesetas para tratar a estos 1000 hemofílicos. Todo el presupuesto del tercer Hospital más grande de España se irá en el tratamiento de estos críos. Pero tranquilos, que todavía nos queda ayudar a los niños hemofílicos rusos, argelinos, polacos, egipcios, etc. ¿Hasta cuándo sostendremos lo insostenible?.

La próxima entrada será sobre las posibles soluciones que se me ocurren, pero me encantaría oíros a vosotros.

sábado, 7 de marzo de 2009

Enfermedades inventadas

Mi salud ya no me pertenece, es de mi médico de cabecera o de mi especialista.

La medicina da respuestas para todo y soluciones para casi todo. Hay una pastillita para cada problema.

El dolor siempre es malo.

Yo no tengo que hacer nada para conservar mi estado de salud en las mejores condiciones posibles.

Una Resonancia Magnética Nuclear lo diagnostica todo.

Ante cualquier problema, acuda a su médico.

Estas y otras muchas afirmaciones similares están medicalizando nuestra sociedad. Muchos problemas puramente sociales se están convirtiendo en patologías médicas. Del uso y la necesidad de la Medicina Pública se ha pasado al abuso de la misma. La tristeza ha muerto, viva la depresión. El violador no es un cabrón sino un enfermo. La drogadicción ha pasado de ser un problema puramente social a ser una patología más. Si estoy gordo es por culpa del endocrino que no me pone la dieta adecuada. Asesinas a alguien y no es un acto criminal, que va, has tenido un simple transtorno mental transitorio. Si tienes muchos miedos padeces de ansiedad.

Tranquilos, que la medicina lo soluciona todo. Tenemos ansiolíticos para los miedos, antidepresivos si se le muere un hijo, terapias cognitivas para que el asesino ya no tenga más transtornos transitorios, antiarrítmicos para el cocainómano y antiinflamatorios si le duele el cuello con 80 años. Tenemos todo tipo de pastillitas, capsulitas, supositorios, inyecciones y operaciones para que le sea comodísimo estar sano sin que usted tenga que hacer nada.

¿Adelgazar pasando hambre y haciendo ejercicio?....¡¡¡¡habráse visto¡¡¡¡, ¿para eso pago la seguridad social?: usted déme una pastillita o una dieta milagro y hágame perder 20 kilos. Que tengo gripe, de eso nada, no me puedo meter en cama: muchas pastillas para que la gripe no la sienta.

¿Que tengo que ponerme un preservativo para no contraer una enfermedad venérea?: oiga usted, que yo pago mis impuestos para follar como quiera. Si la pillo, es que me he puesto malo. Usted me pone el antibiótico y me cura.

Causas
1. No hemos vuelto intolerantes al dolor y al sufrimiento. Precisamente esa falta de tolerancia a algo que es inherente a la propia vida, nos hace padecer más dolor y nos hace sufrir más. Esto no significa que debamos ser unos sufridores. El sufrimiento y el dolor inútiles hay que combatirlos, pero hasta cierto límite y no haciendo de la falta de molestias el eje de nuestra vida. Demasiadas veces, una pequeña molestia acarrea menos problemas que el tratamiento que la hace desaparecer o mitigar.
2. No nos responsabilizamos de nuestra salud. En vez de ello, cargamos con nuestras enfermedades a la Medicina. Pero resulta que los tratamientos siempre conllevan riesgos y no siempre se obtienen resultados óptimos. El mejor tratamiento que existe para una enfermedad es no tenerla. Parece obvio pero, visto lo visto, esta obviedad hay que recordarla. Todos los problemas que conlleva la obesidad se evitarían si nos responsabilizáramos de hacer una dieta correcta. Muchos de los dolores que acarrean una buena parte de las enfermedades reumáticas no existirían, si hacemos del ejercicio físico habitual nuestra forma de vida. El único tratamiento realmente eficaz y sin ningún efecto adverso para el cáncer de pulmón es.....no fumar, o sea, no llegar a padecerlo. Y así podríamos seguir hasta el infinito.
3. Cuando para conservar la salud te bombardean desde todos los medios de comunicación con las 1000 medidas que hay que tomar.....al final no tomas ninguna, sencillamente porque el día sólo tiene 24 horas y no darían para hacer todo lo que hay que hacer para estar sano. Pero es mucho más simple que todo esto. Dejémonos de los miles de consejos, todos ellos bien intencionados, y tomemos sólo tres: coma bien (que no mucho), haga ejercicio y evite los tóxicos (tabaco, alcohol en exceso y drogas). Siguiendo sólo estos tres consejos habremos evitado o paliado el 80 % de las enfermedades.
4. Los médicos tenemos buena parte de culpa de la medicalización. Al fin y al cabo, nosotros somos los principales beneficiarios de que la gente acuda a nuestras consultas. No nos conformamos con las enfermedades de verdad sino que incluso nos inventamos situaciones para “enganchar” a nuevos clientes con “enfermedades” que son poco menos que imaginarias o bien procedemos a etiquetar como enfermedad lo que no es más que un problema social.
5. Las empresas farmacéuticas son las más poderosas y con más beneficios del mundo. Hasta ahí estaría bien si esos beneficios se obtuvieran a través de una lucha efectiva contra la enfermedad, mediante la investigación. Y esto sucede en algunas compañías pero, demasiado a menudo, se dedican a inventar nuevas enfermedades o simplemente a hacer “nuevos medicamentos” que no son más que copias de anteriores en los que ha caducado la patente pero mucho más caros.

Enfermedades inventadas
Algunos ejemplos de enfermedades inventadas, con su correspondiente tratamiento, son las siguientes
1. El duelo. Ya no es algo normal en la vida. Es una patología que hay que tratar con “magníficos medicamentos” que llenan las arcas de las farmacéuticas. La tristeza ha muerto: viva la depresión.
2. La menopausia ya no es un estado natural de la mujer. Es una patología que hay que combatir.
3. El colesterol: nos lo venden como enfermedad, pero sólo es un factor de riesgo. Además, los límites para considerar unos valores normales de colesterol se van bajando, con lo que cada vez más personas “padecen” de esta “terrible enfermedad” y, por consiguiente, cada vez más clientes necesitan de los servicios de la industria farmacéutica. Hoy en día es patológico tener más de 200, (si se pusiera la normalidad en 260 se quedarían con muchos menos clientes) cuando los riesgos reales dependen de otras circunstancias más importantes como el sedentarismo, obesidad, diabetes, tabaquismo, alimentación, etc.
4. La osteoporosis tampoco es una enfermedad sino un factor de riesgo. Todos los estudios realizados indican que existe osteoporosis,y con ello riesgo de tener en el futuro fracturas de cadera, con un valor de -2.5 en cadera. Pero esta cifra en cadera la tienen pocas personas. ¿Solución?: se mide también en columna lumbar, en donde es muy fácil alcanzar esta cifra mágica de -2.5, y ya tenemos millones de nuevos pacientes. En realidad, el riesgo en columna lumbar es ínfimo, y no es necesario ningún tipo de tratamiento medicamentoso. Es suficiente con un poco de ejercicio y una alimentación adecuada.
5. La timidez. ¿Pero no se han enterado?. ¡¡¡No existen los tímidos¡¡¡. En realidad son enfermos de “Fobia social”. Se encontraron algunos fármacos que desinhibían a los que lo tomaban, pero no había público para aplicarlos. ¿Qué hacemos?. La timidez no es un carácter o una consecuencia de unas vivencias sino una enfermedad gravísima que es necesario tratar…..con fármacos.
6. Hipertensión arterial. De nuevo nos encontramos con un factor de riesgo convertido en enfermedad. Si en vez de poner 16 como peligroso situamos el umbral en 14, el número de clientes que usarán pastillas se multiplicará por 100.
7. Niños hiperactivos. El verdadero trastorno por déficit de atención es una enfermedad rarísima que tiene un tratamiento bastante eficaz. Pero son tan pocos los niños con este trastorno, que hay que sumar muchos más “enfermos” a este perturbación. Niños aburridos, maltratados, superdotados, empotrados delante de la televisión durante horas, traviesos, con escaso afecto, son magníficos ejemplares para colocarles el diagnóstico y, con ello, la pastillita. Los padres se ponen contentísimos porque ya no son responsables, la farmacéutica también se alegra, porque tienen un nuevo cliente.
8. Disfunción eréctil. Volvemos al tema de una patología rara, que dispone de un tratamiento eficaz, pero al tener escasa clientela se magnifica el problema. Con 80 años se tiene que seguir en la brecha como si se tuvieran 20. Si estás agotado, con stress, preocupaciones, problemas y no tienes ganas de hacerlo todos los días y a todas horas……no es algo normal ni natural, no, padeces de disfunción eréctil y hay que tratarla con pastillitas. Hay causas orgánicas, como en algunos pacientes con diabetes, pero la mayoría son psicológicas y, desde este prisma, hay que contemplarlas.
9. Disfunción sexual femenina. Ya se disponen de magníficos parches de andrógenos para el tratamiento de esta “enfermedad” tan extendida en las mujeres. Caballeros, ya no se tienen que esforzar tanto. Señoras, ya no tienen que tener tantas jaquecas. La curación está….en un parche.
10. Andropausia. El envejecimiento no es natural ¿quién le ha dicho semejante sandez?. Hay que combatirlo con todas las armas a nuestro alcance.
11. Anorexia y trastornos de alimentación. De nuevo un problema real, que es rarísimo, y se ha magnificado hasta cotas increíbles tratándolo como una auténtica epidemia, de la que nos salvan los laboratorios con sus pastillas. Las cifras hablan de unas 2000-3000 anorexias verdaderas en España. Pero las asociaciones de pacientes y médicos, convenientemente asesorados por la industria farmacéutica, cifran en 500.000 los casos. Pues no, se tratan en la mayoría de los casos, de conductas adquiridas por problemas psicológicos o educacionales.ç
12. Síndrome postvacacional. Jajajajaja. No requiere de más explicación.

En el libro “Los inventores de enfermedades” nos da la clave sobre las distintas formas de crear enfermedades nuevas. Las resume en cinco:
1.-Los procesos normales de la vida como problemas médicos, ejemplo: la alopecia
2.- Los problemas personales y sociales como problemas médicos, ejemplo: la timidez como fobia social
3.- Los factores de riesgo como enfermedad, ejemplo: la osteoporosis
4.- Los síntomas poco frecuentes como epidemias de extraordinaria propagación, ejemplo: la disfunción eréctil
5.- Los síntomas leves como indicios de enfermedades más graves, ejemplo: síndrome de colon irritable.

A este estado de cosas se ha llegado con la plena complicidad de:
1. Médicos, que en la mayoría de casos, lo hacen pensando que están haciendo lo correcto. Si se le presentan datos sobre la peligrosidad de un nivel de colesterol de 200, pues a recetar se ha dicho. Para evitarlo, es indispensable una formación científica sólida pues, aprendiendo estadística, epidemiología y otras ramas del saber científico, se aprende a distinguir la paja del grano.
2. Todos nosotros: en nuestra sociedad se da cada vez con más frecuencia la gran comodidad que supone convertir situaciones vitales en enfermedades, con la consiguiente dejación de responsabilidades propias en manos de otros, como las farmacéuticas, que están encantadas de asumir esas “cargas”. Como apunta Domingo Orozco: los nuevos tiempos llevan consigo la necesidad de estar siempre en plenitud de facultades, "la sociedad manda el mensaje de que se debe aspirar a un estado de completo bienestar, algo que es utópico". Incluso la OMS ya no define a la salud como la ausencia de enfermedad, sino como una situación de bienestar físico, social y mental "por lo que, según esta interpretación, es muy difícil que una persona esté sana".
3. Farmacéuticas, que están encantadas de la dejación de la responsabilidad que cada uno tiene consigo mismo para mantener un buen estado de salud.

Pues la medicina además de curar a personas enfermas... quiere mejorar a las personas sanas, es decir a quitar esas pequeñas molestias que todo el mundo tiene y son normales, pero las farmacéuticas quieren convencernos de que no son signos de salud, y que si se pueden evitar ¿por qué no? sólo tienes que tomar una pastilla o un jarabe, ponerte un parche, o darte un masaje con un gel especial.


La medicina en la que creo intenta curar a personas enfermas, no quiere mejorar a las personas sanas. Las pequeñas molestias que todo el mundo tiene y son normales no son signo de falta de salud. Estamos más sanos de lo que nos hacen creer. El cuerpo humano es la máquina más perfecta que existe, que sabe regularse y que tiene también achaques. Es sobre esos achaques sobre los que hay que intervenir pero sin tocar esa regulación natural que tiene el cuerpo, sin intentar manipular los valores normales y medicarlos para que se ajusten a unos parámetros que se han inventado las farmacéuticas.

lunes, 23 de febrero de 2009

Vitaminas y minerales

Uno de cada cinco españoles consumen suplementos dietéticos, en forma de jarabes, pastillas o enriquecimiento de productos de consumo como la leche o los zumos “enriquecidos con...”.

¿Sirve de algo?
Depende de para quién:
· Sí, de muchísimo, para las multinacionales de la alimentación, algunas empresas farmacéuticas, herboristerias, etc.
· No, un rotundo no, para los consumidores en general. Hay excepciones y, salvo que se me olvide alguna, que seguro que se me olvida, estas son:
1. Durante el embarazo puede hacer falta un aporte extraordinario de ácido fólico o calcio.
2. Durante la lactancia hay que aumentar el consumo de calcio.
3. En dietas de adelgazamiento muy rigurosas de menos de mil Kcal al día.
4. En pacientes ancianos que no estén haciendo una dieta adecuada.
5. En personas vegetarianas que no hagan correctamente este tipo de alimentación.
6. En determinado tipo de anemias por déficit de hierro, vitamina B12 o ácido fólico (faciles de detectar en todos los casos con un simple análisis de sangre).
7. En personas con una Osteoporosis comprobada es necesario un aporte extra de Calcio y Vitamina D.

Problemas con los suplementos
· Las vitaminas hidrosolubles como la vitamina C, B1, B2 o ácido fólico, no causan ningún problema pues, el exceso, es secretado por la orina. La única contrariedad es que estamos pagando por orinar vitaminas.
· Las vitaminas liposolubles: A, D, E, K, no se excretan cuando se consumen en exceso sino que se depositan en el hígado y, a la larga , pueden producir problemas de salud.
· Los minerales, en exceso, también pueden provocar problemas de salud, como hipertensión con el sodio, cálculos en el caso del calcio, Osteoporosis con el fósforo o transtornos cardíacos con el potasio, por poner sólo algunos ejemplos.

Ventajas de los suplementos en personas sanas
Ninguna, ni en deportistas siquiera. No se está ni más sano ni más fuerte, ni se tienen menos resfriados ni la piel más maravillosa.

Con una dieta normal se obtienen suficientes nutrientes de todo tipo para una vida sana. Incluso haciendo una mala alimentación, será muy difícil que haya un déficit y, si lo hubiera, daría los síntomas que pondrían en alerta, como el cansancio en la anemia por déficit.

No me sea cazurro. Coma bien, que no es tan difícil.

viernes, 20 de febrero de 2009

Prótesis de rodilla

La rodilla es la articulación de la extremidad inferior compuesta por los huesos fémur, tibia peroné. Para permitir una adecuada movilidad la superficie articular está recubierta por cartílago. Hay muchas cositas más, ligamentos, meniscos y otras chorradas diferentes que cada una tienen su función.

Hay enfermedades que estropean hasta tal punto la articulación, que deja de ser apta para su cometido provocando menoscabo funcional y dolor. Pero no se preocupe, para eso están las prótesis, que son reproducciones de la región terminal del fémur y la tibia, de diferentes materiales, que se colocan en el lugar de la articulación. Las prótesis mamarias nada tienen que ver con éstas.

Indicaciones
La colocación de una prótesis está indicada cuando la articulación está tan destruida que, el dolor y la impotencia funcional del paciente, le impiden caminar o debe hacer grandes esfuerzos y otros tratamientos conservadores no lo consiguen mejorar.

La artrosis es la causa más frecuente de destrucción articular que obliga a poner una prótesis.

Las artritis, sea cual sea su origen, también puede llegar a necesitar en algún momento la intervención quirúrgica.

Los traumatismos repetidos sobre la articulación también pueden producir el daño.

Antes de llegar al quirófano siempre hay que intentar otros tratamientos.....”para operar siempre hay tiempo”. Los antiinflamatorios, fisioterapia, ejercicios de potenciación de la musculatura, infiltraciones en fases de dolor agudo, así como mantener un peso corporal adecuado, son medidas que siempre hay que intentar antes de recurrir al cirujano.

¿En que consiste la intervención?
Es una intervención que dura aproximadamente una hora. Se suele hacer con anestesia epidural (no se le duerme entero, sólo le atontan algo más de lo habitual). A veces se emplea anestesia general (con Isabel Pantoja no utilizaron ninguna de estas técnicas, emplearon algo mucho más sofisticado: la “anastasia”).

Tras ser convenientemente “anastasiado” y atontado, se cortan los extremos de los tres huesos de la rodilla y se sustituyen por el material escogido.

Al cortar los huesos, se suele sangrar mucho y por eso, en muchas ocasiones, tras la intervención quirúrgica es necesario poner transfusiones.

Durante unos días le dejarán puestos unos tubitos para que los restos de sangre que hayan quedado se puedan drenar.

Riesgos
Los riesgos hoy en día son escasos.
La anestesia puede ser origen de complicaciones, pero hay una especialidad que se aprende a lo largo de muchos años, que es la Anestesiología, compuesta por médicos expertos que antes de la intervención quirúrgica le verán y estudiarán para minimizar los riesgos.

Las complicaciones debidas a la propia intervención son principalmente:
· Hemorragia de la herida.
· La producción de trombosis en la extremidad intervenida. Para disminuir este riesgo, la movilización procoz de la rodilla operada es fundamental, así como un vendaje de compresión y una inyecciones de heparina.
· Infección, ya sea de la propia prótesis o neumonías. Pero no se debe de agobiar, que los quirófanos son muy limpios y los traumatólogos también. Todos vienen duchaditos de casa y después se lavan las manos, muy bien lavadas y se ponen guantes preciosos.
· Rara vez se producen movilizaciones de la prótesis o rotura de la misma.

Después de la intervención
Tras la intervención se enseñan ejercicios destinados a mejorar la movilidad y la fuerza muscular. Hay veces que se ha quedado tan bien que no se precisan y con caminar es suficiente. Finalmente podrá comenzar a caminar y podrá llevar una vida normal (sin excesos) y sin dolor.

martes, 10 de febrero de 2009

Sinovitis transitoria de la cadera

Definición
Se llama así a la inflamación de la articulación de la cadera (si fuera de rodilla u hombro tendría otro nombre) de poca duración (de ahí la sagacidad del término transitorio) que se produce en niños, habitualmente entre los 3 y 10 años de edad. Es más frecuente en varones.

Causas
Desconocemos la causa (en esto tengo el orgullo de compartir ignorancia con los más sabios del tema), pero se cree que puede ser la reacción a una infección viral previa, sobre todo de vias respiratorias superiores (tanto los más sabios como yo estamos de acuerdo).

Síntomas
Es la causa más frecuente de cojera aguda en el niño. Provoca dolor en la ingle afectada, aunque a veces se puede irradiar a la rodilla o a la parte interna del muslo. No suele haber fiebre ni otros síntomas.

Diagnóstico
Suele bastar con la historia típica y una exploración consistente en mover la cadera afectada, que se encontrará limitada en sus movimientos. La confirmación del diagnóstico se hace cuando desaparece el cuadro en pocos días sin dejar secuelas.

A veces se puede pedir una radiografía simple o una analítica, que no diagnostican este proceso, sino que sólo sirven para descartar otras enfermedades. Pero prefiero esperar una semana para ver la evolución y, si nos podemos ahorrar las radiaciones y el mal rato de extraerle sangre, mejor.

Tratamiento
Sobre todo, hay que tratar a los padres. Ver a tu precioso niño cojeando y con dolor, de la noche a la mañana, no debe ser plato de gusto. Tranquilizarlos y asegurarles que se van a poner bien en pocos días y sin ningún tipo de secuela es fundamental.

Para el niño, con reposo en cama durante unos días y un Antiinflamatorio no Esteroideo tipo Ibuprofeno (Dalsy) es suficiente.

Si a los 10 días del comienzo del cuadro sigue el dolor y la cojera, habrá que empezar a estudiarlo para descartar otras patologías.

lunes, 9 de febrero de 2009

Calambres musculares

Los calambres son contracciones involuntarias de un músculo o grupo muscular, muy dolorosos, que duran entre pocos segundos a varios minutos, y se suelen producir después de un ejercicio no habitual o por la noche. Los más habituales son en las piernas.

Causas
· Meter los dedos en un enchufe, da calambres a los osados electricistas, ya sean profesionales o amateurs (más frecuentes en este último grupo).
· Sobrecarga de un grupo muscular tras hacer un esfuerzo no acostumbrado.
· Problemas arteriales o venosos, sobre todo estos últimos (varices).
· Sobrepeso.
· Deshidratación.
· Déficit de algunos minerales (poco frecuente pero demasiado diagnosticado).
· Embarazo. Esta causa suele ser más frecuentes en mujeres, sobre todo si esperan descendencia.
· La causa más frecuente: calambres de origen idiopático. Osea, se producen, y ni pajorera idea de porqué.

Cómo prevenirlos
· Estirar las pantorrillas antes de acostarse.
· Un baño caliente antes de acostarse puede prevenir algunos episodios.
· Beber abundantes líquidos (el coñac no se cuenta como líquido), frutas y verduras, para que no nos falte de ná.
· Hacer ejercicio de forma regular, por ejemplo andar. Ver el partido de fútbol de la Sexta, no cuenta como ejercicio.
· Evite estar demasiado tiempo sentado o en una misma posición.
· No se deje embarazar a no ser que sea imprescindible.
· No meta los dedos en los enchufes.

Tratamiento
· Estirar suavemente el músculo afectado.
· Masajear la zona acalambrada y aplicar calor local.

martes, 3 de febrero de 2009

Hallux valgus (Juanete en cristiano)

El juanete es una desviación del dedo gordo del pie hacia el resto de los dedos, dejando una prominencia en el lado interno del pie. Se produce con más frecuencia en las mujeres a partir de los 60 años de edad (en plena adolescencia, justo después de desaparecer los granos). Por este motivo, tras múltiples disquisiciones de los lingüistas más afamados, no se sabe porque se les denomina juanetes y no juanitas.

En algunos casos hay una predisposición genética, sobre todo cuando aparece desde la adolescencia (coincidiendo en este caso con los granos). Pero la causa más frecuente es el uso de calzado inadecuado, precioso, pero mortificante para los pies. Los tacones de medio metro y, principalmente, las puntas afiladas hasta extremos insospechados, son la causa principal.

Síntomas
El más evidente es la deformidad del pie. Pero también puede producir dolor, aunque no siempre. Es un dolor en la prominecia formada, que aumenta al andar y usar zapatos que aprieten mucho y mejora con el reposo y el calor local. También se puede notar crujidos o roces al movilizar el dedo gordo del pie. La intensidad del dolor es muy variable y puede ser ir desde una leve molestia hasta un martirio que merma la calidad de vida.

¿Como se diagnostica?
Para un fantástico médico como yo, no tiene misterio. Reproduzco a continuación mi manera habitual de llegar al diagnóstico de esta misteriosa patología (es una exclusiva mundial):
Yo: ¿Qué le sucede?.
Paciente: Que tengo un juanete que me está haciendo la vida imposible.
Yo: no se preocupe, el motivo de su dolencia es.....¡¡¡un hallux valgus¡¡¡¡.

Las radiografías sólo son necesarias cuando se piensa operar.

Tratamiento
El más importante es el uso de un calzado adecuado. De esta forma, la mayoría deja de dar problemas y permiten llevar una calidad de vida normal.

Pero hay casos en que esto no es suficiente. Personalmente no me gusta emplear Antiinflamatorios no Esteroideos porque, aunque son efectivos para mejorar el dolor, casi nunca compensa este beneficio los posibles efectos secundarios de estos medicamentos. Además, hay que tener en cuenta que no curan, son un simple tratamiento sintomático.

La fisoterapia puede ayudar, así como el calor local o disminuir la actividad.

El uso de almohadillas, que se pueden encontrar en cualquier ortopedia (evitar las tiendas de todo a cien en estos casos), alivian en otros muchos casos. También se puede conseguir mucha mejoría con un calzado ortopédico o plantillas, que se las deberá recetar su especialista.

Cuando el juanete se pone tonto y nada de lo anterior mejora, la inmovilización del primer dedo o la infiltración del mismo, pueden ser eficaces, pero sólo durante una temporada.

Pero hay ocasiones en que, más que un juanete, es un Don Juan en toda regla. En estos casos sólo cabe la corrección quirúrgica. Hay un alto porcentaje de éxito en esta cirugía, pero no el 100% de los casos, desgraciadamente. En ocasiones la corrección es incompleta o vuelve a salir.

lunes, 2 de febrero de 2009

Histeria

Histeria procede del griego hysteros, que significa útero.

Hoy en día, se confunde el término con el insulto. Voy a intentar esquematizar, cosa nada fácil, lo que es el verdadero término histeria. Intentaré huir de conceptos puramente psiquiátricos que harían poco inteligible el texto.

Para empezar, diré que ni siquiera los psiquiatras, psicoanalistas o psicólogos, están de acuerdo en lo que implica este término. Por otro lado, cabe diferenciar lo que es neurosis histérica, como patología, y lo que es una estructura de personalidad histérica normal.

La enfermedad (neurosis histérica) conlleva la aparición de los síntomas típicos de la somatización, cuyo estadío final más conocido son los desmayos teatrales con movimientos convulsivos, aunque hay cientos de síntomas que pueden ser reproducidos en esta enfermedad. Afecta al 1% de la población, la mayoría mujeres, con lo que su frecuencia podemos observar que es realmente alta.

Pero no es de la enfermedad de lo que hoy quiero hablar, sino de la personalidad histérica, mucho más extendida que la neurosis y también mucho más frecuente en las mujeres. Para compensar, el próximo tema a tratar será “El niño rey”, muy similar a la histeria, pero predominante en hombres.

La estructura de personalidad histérica nada tiene que ver con algo insultante, eso lo quiero dejar claro, no es mi objetivo meterme con estas mujeres, sino intentar describirlas para conocerlas y, en su caso, saber comprenderlas y tratarlas. En todo momento me expresaré en femenino, como lo haré en masculino cuando hable del niño rey, aunque eso no significa que no hayan hombres histéricos.

Origen de la histeria
Los autores no se ponen de acuerdo en este punto (ni en este ni en otros muchos), por lo que expresaré mi opinión al respecto. Por consiguiente, lo que voy a escribir no se puede tomar como algo científico ni demostrado, pues no hay un nivel de evidencia elevada. Se debe tomar como una reflexión sobre lo que he leído y conozco personalmente (un porcentaje altísimo de histéricas tienen síntomas de mi especialidad).

Como en cualquier aspecto de la personalidad, la genética debe jugar un papel importante en el “ser histérico”, pero esto no se ha comprobado. El hecho de afectar predominantemente a las mujeres, a pesar de tener los mismos condicionantes en la primera infancia que los hombres y, que esta personalidad ya se manifieste en los primero años de vida, sugieren la existencia de un mecanismo genético, que en ningún momento se debe considerar como un factor determinante sino más bien como una tendencia.

Factor emocional: la separación de la madre (o de la persona que tenga el papel maternal) en el primer año de vida, la falta de caricias, abrazos y contacto físico y de una seguridad en el entorno puede ser el origen más probable de esta patología. La angustia y pánico del bebé al verse solo, aislado y frágil, con una contínua llamada de atención mediante el llanto que no es respondida por los progenitores. Este es el inicio de las dos características sobresalientes de la personalidad histérica: la separación y el miedo a no-ser.

Características de la histeria
La nula tolerancia al abandono y el miedo a no-ser (la necesidad de ser tenida en cuenta junto al miedo al compromiso) conforman las características fundamentales de estas mujeres:
1. Dependencia emocional. Tienen una necesidad imperiosa de “colgarse de alguien”. Para conseguirlo recurren a:

2. Un impulso irrefrenable de llamar la atención. Si no lo consiguen, vendrán las tan temidas pataletas. Dependiendo del entorno en que se muevan, llamarán la atención de determinada manera: pueden ser las más religiosas o puritanas, en un determinado medio, o hipersexuales y amorales en otro. Lo que haga falta para conseguir la aceptación.

3. Su primer arma siempre es la complacencia. Intentan dar todo lo que suponen que lo demás quieren. Sólo si no lo consiguen complaciendo echarán mano del chantaje e incluso la violencia. Con los hombres son seductoras y exhibicionistas, con las mujeres, sufridoras y teatrales.

4. Percepción interesada: sólo ven lo que quieren o les interesa ver. No hacen introspección, odian mirarse a sí mismas. Actúan para atraer la atención y retenerla. Son actrices que hacen el papel que necesitan en cada momento, pero sólo son actrices, detrás del personaje no hay nada más. Esto nos lleva a otra característica:

5. Paradojas contínuas. De un gran y salvaje apego pueden pasar al más despiadado odio en la ruptura. De aparentar ser una mujer hipersexuada a ser frígida en la cama. Pero no hay una elaboración consciente. Para ella el universo es tal y como lo percibe en un momento dado y en su estado de ánimo actual. Lo que hoy es blanco, mañana es negro con la misma certeza.

6. Relación de pareja muy difícil, imposible de comprender por el compañero. Hay una necesidad enfermiza de ser amada, pero la supuesta necesidad de dotar de seguridad a la relación se ve continuamente sorprendida por una necesidad paradójica de poner a prueba continuamente esa relación. Recelan continuamente de la sinceridad del sentimiento del otro e incluso necesitan demostrar su hipocresía. Imploran y suplican depender del amor del compañero y a la vez verifican que a ese amor le falta alguna cualidad esencial. Pasan del “no puedo vivir sin ti” al “tu amor no es bueno”. Del amor más teatral al odio más vengativo. Divorciarse de una mujer histérica puede llegar a ser terrible. Muchas de las falsas denuncias de malos tratos y de los “raptos legales” de hijos proceden de mujeres así.

7. Toda histérica es inmadura. La madurez es el antídoto perfecto contra la histeria. Los adultos no pueden dedicarse a fantasías y anhelos de adolescentes sin llegar a ser progresivamente inaceptables a medida que la edad avanza.

8. Sufren más que nadie y llevan este sufrimiento más como un orgullo que como un dolor. Una madre que no sufra con sus hijos no es buena madre. No existe una mujer que no le haga sufrir su marido.

9. Suelen buscar un cierto tipo de hombre: maternales. Están siempre a su disposición, siempre la comprenden. Son fácilmente manipulables y se convierten en los voceadores de su dolor.

En resumen: cásese con una histérica y no se aburrirá jamás.

lunes, 19 de enero de 2009

Perfeccionismo

No hay que confundir el perfeccionismo con el deseo de intentar hacer bien las cosas y mejorar. Estamos ante una personalidad perfeccionista cuando el afán por mejorar procede de una inseguridad y crea conflictos psicológicos internos y problemas de relación externos.

Características
· En una persona perfeccionista no existe lo bueno, sólo lo mejor.
· No se permiten el error y, cuando se produce, lo viven con ansiedad, frustración y culpabilidad.
· Tienen altas expectativas, no siempre acordes con las propias capacidades.
· Tienen un nivel de autoexigencia (y de exigencia hacia los demás) muy elevado.
· Intolerantes. Sólo hay una forma de hacer las cosas: perfectas. Todo lo demás está mal.

Origen
· Inseguridad. La causa más frecuente, sin lugar a dudas. Las fuentes de esta inseguridad son múltiples. Tienen miedo a equivocarse y precisan continuamente del visto bueno de los demás. Quieren cumplir con las expectativas que los demás tienen en él (o que se imagina que tienen depositadas).
· Padres exigentes, habitualmente perfeccionistas también ellos, que nunca están satisfechos con los logros de los hijos.
· Expectativas sobreelevadas de los padres. Quieren ver cumplidas las expectativas propias no alcanzadas en sus hijos.
· Alta competitividad en su entorno. Sólo triunfa el número 1, los demás son considerados fracasados.

Consecuencias
Puede ser ventajoso en algunos aspectos. Suelen ser trabajadores magníficos ya que el perfeccionismo promueve el esfuerzo y el trabajo bien hecho. Sin embargo, son muchos más los aspectos negativos:
· Insatisfacción. Se puede ser perfeccionista, pero no se es perfecto ni el entorno lo es, por consiguiente, nunca terminan de salir las cosas como le gustarían, creándose un eterno estado de insatisfacción.
· Relaciones difíciles, tanto con la pareja, hijos, amigos o en el entorno del trabajo debido a un nivel de exigencia muy alto, que nunca es satisfecho. Siempre piden más y mejor.
· Frustaciones múltiples, por muy buenos resultados que obtengan en sus actividades, porque siempre se puede ser mejor. Además, los objetivos, a veces poco realistas que se marcan, tienen muchas probabilidades de no verse cumplidos. Tienen 100 cosas buenas, pero no las disfrutan porque siempre hay una cosa mala que lo impide.
· Capacidad de desarrollo personal y aprendizaje limitado, porque el miedo a equivocarse les impide correr riesgos.
· Preocupaciones múltiples. Pueden estar enormemente preocupados por un problema pero, cuando lo resuelven, no disfrutan de lo obtenido pues rápidamente surgirá algún otro “problema” que hay que resolver.
· Fruto de lo anterior, es una especial susceptibilidad para padecer depresión y ansiedad.

¿Qué se puede hacer?
En un adulto, el tratamiento cognitivo-conductual puede mejorar mucho el cuadro.

En un niño, la actuación de los padres es fundamental.
· Los niños deben ser educados de acuerdo con sus capacidades y no según las expectativas de los padres.
· Fomentar la felicidad y no tanto el éxito académico.
· No alabar el exceso de dedicación.
· Fijar objetivos realistas.
· Cuando se fracasa no se debe presionar, sino alabar el esfuerzo que se ha hecho.
· Hay que ser bueno, no es necesario ser el mejor.

martes, 13 de enero de 2009

Diccionario Médico: AER-AGU

Aerobio
Germen que sólo se desarrolla en presencia de oxígeno. Sobre si necesita jamón de pata negra o langosta para desarrollarse mejor, no pone nada en mis libros.

Aerofagia
Deglución de aire seguida de eructos. Si tiene hambre...¡cómase un bocata de chorizo en vez de tomarse una tapita de aire¡....está mucho más rico.

Afaquia
Falta de cristalino. Sucede siempre que se operan las cataratas que, al fin y al cabo, sólo consiste en que el cristalino de empaña y ¿para que quiere alguién un cristalino empañado?.

Afasia
Pérdida de la facultad de expresión, ya sea hablada, escrita o por señas. Mi vecina Mari Puri, preferiría la muerte antes que quedarse sin poder hablar.

Afebril
Que no tiene fiebre. Sólo hay una excepción a este axioma: la fiebre del sábado noche, que se manifiesta por dolor de cabeza el domingo por la mañana.

Afonía
Pérdida o disminución de la voz generalmente por irritación de la garganta. Mi vecina Mari Puri prefiere quedarse paralítica a quedarse afónica....¡¡¡la pobre¡¡¡.

Afta
Pequeña úlcera que aparece en la boca, los ojos o genitales. Suele producirse por virus. No se lo trate a mordiscos, no se le aliviará.

Agalactia
Quedarse sin leche después de un parto. El mejor tratamiento conocido es un buen biberón.

Agenesia
Defecto de desarrollo a falta de alguna parte del cuerpo. Entre los políticos es muy frecuente la agenesia cerebral.

Agnosia
Cuando una persona no reconoce las personas u objetos. Se produce en diversas enfermedades cerebrales, sobre todo los accidentes vasculares. Todos los mafiosos también la padecen cuando son interrogados por la policía.

Agarofobia
Miedo a encontrarse solo en un espacio abierto o al aire libre. Puede verse en distintos tipo de enfermedades psiquiátricas pero, muchas personas normales, también la padecen. Los árbitros que pitan un penalti en contra del equipo de casa tienen agarofobia aguda que se cura pitando un penalti a favor del equipo de casa.

Agranulocitosis
Falta de leucocitos (glóbulos blancos). Suele ser debido a enfermedades graves o a la toma de ciertos medicamentos. Los leucocitos nos defienden de los microbios por lo que, su falta, puede producir múltiples infecciones. Hay que poner antibióticos para defendernos ya que, a palos, no se mueren los microbios.

Agudo
Todo lo que aparece rápidamente. No tiene porque ser intenso. Cuando hace un sol espléndido, usted sale sin paraguas y, de forma aguda, se pone a llover: se mojará agudamente.

Agujetas
Dolores punzantes, que se sienten fundamentalmente en las extremidades, después de realizar ejercicio físico no habitual. La gimnasia hecha de forma progresiva y constante consigue que no las padezcamos. En contra de la opinión de algunas personas que las han tenido, las agujetas no se tienen en el pelo.

martes, 6 de enero de 2009

Angina de pecho e infarto agudo de miocardio

El término angina de pecho no se refiere a la amigdalitis de las mamas, sino al dolor en la parte central del pecho producido por falta de riego (isquemia) al músculo cardíaco (miocardio). Se produce por obstrucción de las arterias coronarias, que son las tuberías que llevan la sangre, con su oxígeno y alimento, al corazón.

La diferencia entre angina e infarto radica en la duración de la isquemia. Si ésta es demasiado prolongada, la zona del corazón no irrigada muere, no se recupera. A esto lo llamamos infarto. Dependiendo de la importancia de la zona muerta y de su extensión, será más o menos grave y, la recuperación posterior, dejará más o menos secuelas. En la angina, la falta de riego es de corta duración y no se llega a morir ninguna zona, pudiéndose recuperar por completo.

Síntomas
Opresión o malestar en la parte central del pecho (dolor precordial), o en la boca del estómago que, en ocasiones se irradia hacia la mandíbula o el brazo izquierdo y que aparece al realizar un esfuerzo, ya sea de tipo físico o psíquico, y se alivia con el cese de tal actividad.

Este es el dolor típico, pero se puede presentar de muchas formas, en diferentes localizaciones e incluso en reposo. Si le duele el dedo gordo del pie, posiblemente no se trate de un infarto ni de una angina, aunque fastidie un montón.

¿Como se diagnostica?
Los síntomas anteriores no son suficientes para establecer el diagnóstico ya que multitud de enfermedades pueden producir síntomas muy parecidos, como la hernia de hiato, la Fibromialgia o una úlcera de estómago o de duodeno.

En un Servicio de Urgencias le practicarán una radiografía de tórax, un electrocardiograma y un análisis de sangre para determinar si existe algún trastorno que pueda causar el dolor del pecho, como por ejemplo una anemia, así como determinadas enzimas que se liberan en caso de un infarto, como la CPK.

En un Servicio de Cardiología, ya sea estando ingresado o en una consulta, le pueden practicar diversas pruebas. Las más habituales son:

Ergometría (prueba de esfuerzo): le suben a una cinta de andar y deberá ir aumentando progresivamente el esfuerzo, mientras le hacen un electrocardiograma. Si hay angina de pecho al llegar a determinado umbral de esfuerzo, y se correlaciona con unos cambios determinados en el electrocardiograma, la prueba se considera positiva y es suficiente para establecer el diagnóstico de angina de pecho.
Coronariografía: se realiza introduciendo un catéter (un tubito) a través de una vena para llegar hasta el corazón donde inyectará un contraste en las arterias cardiacas (coronarias) para ver el grado de obstrucción de las arterias. Tiene algunos riesgos pero, hoy en día, se producen raras veces y no molesta demasiado. Muchas gente lo conoce como catatarismo, caterismo, catering o cataratarismo. De todo he oído en la viña del Señor. A ver, repitan conmigo. CATETERISMO. ¡Muy bien¡.
• En ocasiones, también se solicitan ecocardiografias o gammagrafías, pero las dos anteriores son las pruebas complementarias más importantes.


Gravedad
Las hay para todos los gustos. Los infartos, sobre todo si no se tratan de inmediato, pueden llegar a producir la muerte a un 30% de los pacientes que lo sufren. Hay que resaltar que, la mayoría de estas muertes, se producen antes de llegar al Hospital. Se trata de una emergencia médica en la que la rapidez es fundamental para salvar la vida. Las ambulancias no tienen esas lucecitas y esas melodías porque vayan de fiesta. Una vez en el Hospital, las primeras 48 horas son las más críticas, pues suelen ser en las que se pueden producir las complicaciones más graves. Tras estos dos primeros días, en la mayoría de casos, podemos respirar tranquilos.

La angina de pecho bien controlada (haciendo el tratamiento adecuado), aunque puede producir complicaciones, puede permitir una magnífica calidad de vida. Hay algunos casos muy graves, pero son las excepciones.

Tratamiento
A) Lo que debe hacer el médico
Se puede dividir en tres apartados básicos.
1. Medicación: fundamentalmente medicamentos antianginosos (nitritos, betabloqueantes) aunque en determinados pacientes, pueden hacer falta otro tipo de fármacos para corregir el colesterol, la hipertensión arterial o la ansiedad.
2. Angioplastia. Consiste en desobstruir las arterias mediante la introducción de catéteres. Como cuando se obstruye una tubería y metemos cables para vencerla.
3. Cirugía. Sólo se realiza en casos muy graves y avanzados

B) Lo que debe hacer el paciente
1. Seguir las recomendaciones de su médico y tomarse las pastillitas.
2. Control adecuado de la Hipertensión arterial, el colesterol o la diabetes, que son factores predisponentes.
3. No fumar ni un cigarrito siquiera.
4. Alimentación sana. Recuerde que alimentarse bien no consiste en llenar los platos hasta arriba, sino más bien todo lo contrario, por ejemplo, sírvase la sopa en el plato de postre (que mala leche, jejejejeje).
5. Hacer ejercicio a diario. Andar a un paso que no le produzca dolor en el pecho es estupendo. Conforme pasen los meses, notará que cada vez podrá ir más rápido y podrá estar más tiempo. Una hora al día puede ser suficiente.